Investigación a Facebook

No soy un enamorado de los británicos, especialmente porque siempre son los fieles guardianes de los Estados Unidos  en Europa, apoyando prácticamente cualquier decisión que aquellos tomen, especialmente cuando se trata de apoyar intervenciones militares. También me resulta bastante repulsiva su actitud en las colonias que han mantenido y en su consabido racismo. Pero tengo que admitir que, en algunos casos, o, en algunas de sus iniciativas, son realmente ejemplares.

El parlamento  británico es una entidad seria, y que se ha merecido un respeto en todo el territorio. Allí un miembro del gobierno no se va de rositas cuando es interpelado. Hasta que el parlamentario que pregunta no queda satisfecho con la respuesta,  puede continuar interrogando.

Lo que me resulta plausible en esta ocasión de dicho parlamento es que ha propuesto una supervisión ética y más sanciones para Facebook y otras redes sociales y ya era hora de que alguien le plantase cara a este Lobby brutal y manipulador, que acapara información de millones de usuarios en todo el mundo, información que nadie sabe para qué es utilizada. Una industria de la comunicación que se permite cercenar la libertad de expresión de sus usuarios, haciendo de su capa un sayo y promocionando lo que considera que le favorece y censurando lo que considera que no le conviene.

Si el resto de parlamentos de Europa y del resto de occidente tomasen ejemplo de esto, se acabaría con un gigante manipulador que juega con la disponibilidad de los datos de los usuarios, algunos bastante sensibles, para favorecer a algunas empresas y penalizar a otras, y para influir políticamente en la población censurando opiniones o difundiendo otras, obedeciendo siempre a los intereses de las políticas conservadoras , en perjuicio de las progresistas y opuestas a las élites del poder – y esto no lo digo yo, sino que lo dice el informe británico, catalogando a Facebook de gánster digitales.

Eso también sucede aquí. No hay más que observar cómo se banea a muchos usuarios que publican artículos o comentarios contrarios a sus intereses.