Queda muy poco para que la ciudadanía pueda votar de manera libre, por medio de una papeleta y con una convicción pasmosa (y más en esta ocasión tan importante) al presidente y representante del gobierno central español. Queda muy poco para que el sufrimiento, la arrogancia, el gigantesco e innecesario gasto de nuestro dinero (pagado por medio de los obligados impuestos) y la desprotección hacia el pueblo, sea sólo un mal y largo sueño. Quedan días contados para que el orgullo, la memoria de un pueblo abatido y casi sin esperanza, pueda elegir a su representante y así lograr que España sea la base de un cambio democrático y justo, o que todo siga como hasta ahora… aunque con algún parche para callar a los electores.
Un gobierno no es una representación al uso. Es la constancia, la actividad y el reflejo de las personas que habitan un país. Es el saber solucionar problemas de forma rápida, eficaz y justa. Es la manera que tiene un pueblo, como el español, de ser oído y atendido por los representantes internacionales. Es algo que realmente importa, ya que elegir a la persona adecuada para llevar las riendas de un estado, impera en lo que ese estado va a ser. Que esa persona logre formar a un equipo que se preocupe de la protección de la ciudadanía a la que representa, sin caer en la trampa del egoísmo económico o el beneficio a amiguetes. Que ese equipo y el presidente sean leales a sus convicciones y al programa electoral que se vota. Que si no es posible cumplir lo prometido, renuncien a seguir ostentando el título de representantes del estado. Un Presidente y Equipo de Gobierno con quien se pueda hablar, hacer preguntas en vivo (y no a través de un plasma), limpio y sin atisbo de malsanas intenciones, ni mochilas de corrupción.
Quien sea presidente del gobierno se topará de bruces con los chanchullos que el PP ha estado practicando a espaldas de la ciudadanía durante esta legislatura que ya caduca. Se dará de cara con la mala praxis de un partido, cuyo único fin ha sido el de enriquecer y vanagloriar a los poderes económicos y especulativos, esos que nos llevaron a lo que hoy seguimos sufriendo. La Crisis. Una crisis de desigualdad, de impudicia y de descaro ante la mayoría social.
Quizás se encuentre con la oposición o la asociación de un PSOE atado en corto por esos mismos poderes fácticos que tienen el poder real del Partido Socialista Obrero Español. Y seguramente habrán desacuerdos económicos con CiudadanosC’s, quienes imitan muy bien las políticas antisociales del PP. A lo mejor, los pocos que estén de acuerdo con que se hagan políticas sociales y de rescate ciudadano sea Ahora en Común, cuya principal cabeza en la actualidad es Alberto Garzón. Quizás haya un apoyo de propuestas con el PSOE, siempre y cuando sea segundo de abordo en el gobierno. Todo son especulaciones y esperanza, pero hay que tener muchas ganas de querer cambiar un país desde sus raíces este próximo 20D.
Por supuesto y como os habréis dado cuenta, yo firmo por un gobierno de Podemos. Donde un “tío con coleta” sea quien represente a España en el mundo y en la UE de los especuladores y lobbies que gobiernan en las sobras. Con un equipo de gobierno donde el rescate ciudadano, las políticas sociales, el regreso de nuestros expatriados y el crecimiento de una economía justa, real y limpia, esté garantizado. Yo veo un país con un gran futuro, realmente social y de todos los hombres y mujeres con esperanza. Un país donde las leyes protejan al pueblo. Un país donde el Pueblo realmente sea SOBERANO.
Yo Lo Veo. Votaré por tod@s. Votaré por mi país.
#PODEMOS
Ya, mucha palabrería, pero solo humo.
Lo siento, este partido es fachada, o ni eso, cartón yeso a lo sumo, escenario de un teatro, de actores que interpretan el papel que el público quiere oír, una gran función, pero cuando caiga el telón y tras las elecciones volvamos a casa, todo seguirá igual.
Porque no hay soluciones reales, ya que Podemos empezó con soluciones como la renta mínima que ya abandono por absurda pero ahora vive de reflejarse en otros países, pasaron de querer ser como Venezuela a querer ser como Dinamarca y su política laboral… (Je, viva la ignorancia, )
Solo dare un ejemplo, el subsidio del paro es una de las grandes lacras de este país que solo sirve para alimentar a vagos y maleantes y solo en muy pocos casos sirve para ayudar a personasen grave crisis. Y lo voy a explicar. Si el gobierno tiene 50 millones de euros y lo gasta en pagar el paro, da el dinero a cambio de que no se genere ningún bien para la sociedad. Sin embargo si gastará ese dinero en construir un puente, o dar mas cobertura sanitaria, o en los gastos de la ley de dependencia estaríamos generando puestos de trabajo que generan un bien al país, como puede ser un puente que une dos poblaciones, o en curar mas enfermos o en cuidar dependientes. El gasto es el mismo pero en el caso de usarlo en pagar parados los únicos beneficiafos serán el bar de la esquina donde se reúnen los parados a tomar una cerveza y jugar a las cartas o en el caso de gastarlo en bienes que generan beneficio.
Así que reflexionar en que tipo de sociedad queremos convertirnos y sobre todo reflexionar y pensar que país quereis. Un país de subvencionados que solo se benefician a su mismos y sus xxx de teatro, ocupas, parados, ninis, o un país desarrollado donde la sociedad produce en conjunto un país mejor.