Quisiera disculparme ante aquellos/as que por una casualidad hayan encontrado a faltar últimamente mis artículos, pero desde este pasado verano tengo entre manos un proyecto nuevo además de tener que conciliar la vida laboral ya existente con la personal. Es por ello que no puedo dedicarme a tuiter y su mundo de una forma tan asidua como quisiera.
No obstante lo anterior, sentía la obligación moral para conmigo mismo de hacerle justicia a tan magnánimo movimiento, sí, ese que ha llevado a cabo hace unos días aquel partido cuyas siglas daban a entender que la sociedad, aunque de forma gaseosa, aún disponía de ciertas esperanzas para entender la sociedad de una forma un poco más justa. Creo que no hace falta que me explaye mucho más para entender que me refiero a la abstención del conocido hasta hace unos meses, Partido Socialista Obrero Español.
Ya con las manifestaciones públicas (que bien podrían haber sido púbicas) de la Cortijera de Andalucía, del Almirante de yate González y algún que otro estómago agradecido, muchos ya se dieron cuenta de que el socialismo del PsoE, no era más que un espejismo grabado fuego en la psique de esta sociedad española, a tenor de las batallas intestinas que parecían desarrollarse en el congreso de los diputados y que en realidad (y así lo entendemos demostrado), no eran más que representaciones teatrales. Grabado a fuego, sí, pero un espejismo al fin y al cabo. Le envié varios tuits al señor Sanchez-Castejón diciéndole que se dejase de historias y de discursos psoeros vacíos de sentido y nacidos del caciquismo que reina en ese “partido político”. Le comentaba, como muchísima más gente, que hiciera gobierno con Podemos y otras fuerzas políticas que viendo lo visto, entienden de qué va esto de la democracia y de lo que representa y quiere decir que el “poder reside en el pueblo”.
El señor Sanchez y como cabía esperar de a quien le falta valor, sucumbió al discurso e intereses del caciquismo interno que crea y se aprovecha de la legislación para enriquecer a los amigotes y así enriquecerse ellos mismos. Le honra que ahora ya fuera del mando de la secretaría general de ese partido, haya dimitido como diputado en no compartir la abstención, y señor Sanchez, aún le honraría más morir matando de verdad: diga de una vez públicamente lo que todo el mundo sabe pero quiere oír de su boca y a los cuatro vientos. Lo de la entrevista con Jordi Évole, tan sólo es un aperitivo, y usted y la sociedad más o menos informada, lo sabe. Hable por favor.
Bueno, dejemos al señor Sanchez tranquilo, que al fin y al cabo debe ser uno de los que menos culpa tiene de que haya pasado la desgracia que ha ocurrido y que no es otra que un nuevo gobierno neoliberal, capitalista, caciquista y católico al servicio del mercado y sus intereses.
Ya puede estar tranquilo Almirante González; usted seguirá cobrando sus prebendas institucionales a costa de los impuestos que todos pagamos. Seguirá cobrando sus más de 200.000 euros anuales de una gran empresa del gas y otras cosillas que tenga por ahí, y sabe ¿Por qué? pues porque gracias al voto de millones de engañados o simplemente de millones de neoliberales que aún no han salido del armario, han permitido que su partido se abstenga para que todo siga igual; hecho una mierda corruptiva.
Ya puede estar tranquila Cortijera; acaba de allanarse el camino para llevar al desastre a esos cientos de miles de personas de cierta edad, que por culpa de la incultura de la que les abasteció el franquismo, hoy en día aún creen que su PsoE hace políticas sociales y que la auténtica izquierda no son más que unos oportunistas que no saben de nada.
Gracias diputados del PsoE, gracias. Con su abstención han permitido que aquellos que prostituyen las empresas y servicios públicos a favor de grandes empresas privadas y en detrimento del pueblo, sigan gobernando. Gracias PsoE, gracias. Con su abstención han permitido que los responsables de la desaparición de miles de millones de euros anuales, sigan gobernando. Con su abstención han permitido que aquellos que entienden la soberanía en las instituciones y no en el pueblo, sigan gobernando. Con su abstención han permitido que aquellos que regalan más de 11.000 millones de euros anuales a la iglesia católica (en lugar de asignarlo a políticas sociales) sigan gobernando. Podría seguir diciéndoles lo que han permitido con su bastarda y cobarde abstención, pero finalizaré este artículo recordándoles sólo una cosa más;
[Tweet theme=»tweet-box-normal-blue»]Con su abstención, han permitido que en el gobierno sigan los nietos de aquellos que mataron a nuestros abuelos[/Tweet]
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