Se nos rien en la cara, pero ya nos hemos cansado

En entre todos los temas de los que quisiera hablar, no encuentro otro más interesante y acertado que el de la BURLA que nos hace sentir más ridículos y, a la vez, más cabreados con quien, cada día, nos la hace. Porque, vamos a ser serios (valga la contradicción)… ¿no sentís que, a medida que pasa esta legislatura, se nos llena la cara de las babas de aquellos que se descojonan de nosotros? Ejemplos hay muchos… y quiero recordar unos cuantos para que, como hago cada día al leer mis tuits, periódicos digitales o al ver los programas de televisión que creo que merecen ser vistos por su “objetividad”, os sintáis como yo. Un espectador de circo.

Un pequeño repaso a la actuación:

Aún estábamos en plena legislatura de ZP, cuando un henchido Mariano Rajoy hablaba de “la subida del IVA como el sablazo del mal gobernante”. Recordemos que, poco después de entrar al poder, lo subió “porque era lo que había que hacer”. Ya en plena campaña electoral, en un “debate” entre el actual presidente del gobierno y el profesor Rubalcaba (elegido a dedo por Zapatero para ser Secretario General del PSOE), hablaron del dinero público que “jamás le daré a los bancos, como ustedes han hecho”, en referencia al rescate de las Cajas Públicas de Ahorro que gestionaban el Tridente Nacional de la Política (PP-PSOE-IU) y sus respectivos compis autonómicos. Recordemos que, en lugar de avalar económicamente los ahorros de la gente que tenía su dinero allí, se decidió por “eliminar todos los activos tóxicos” pidiendo a Europa “un préstamo en condiciones inmejorables” -para los propios bancos, faltó decir- cuyo uso y reparto está investigando la UE, mientras tenemos que pagarlo todos los españoles. Ya, habiendo asido el poder tan ansiado (siempre creí que quería ser presidente, no para gestionar el país como “dios manda”, -palabras de Rajoy- sino para cobrar esa paga vitalicia que le dan a los inútiles que han llegado a la Moncloa), don Mariano Rajoy Brey rompió todo contacto con la realidad, como así hiciera su predecesor J.M. Aznar, al alcanzar su tan ansiada mayoría absoluta. Y también rompió todo contrato que, delante de una cruz, una biblia y la Constitución (tan sagradas para otras cosas), juró para defender los intereses de todos los españoles. Aún se desternilla de nosotros cada noche, al recordarlo.

En cualquier otro país democrático, esas primeras “decisiones” que tomó el actual presidente del estado, lo habrían empujado a una moción de censura y habría sido expulsado por haber roto el contrato por el que los españoles le habíamos dado nuestro voto. Pero esto es España, donde las leyes están hechas por y para el bipartidismo y sus componentes humanos (políticos corruptos, corruptores, amigos y jueces afines). Nadie ha querido cambiar la Ley de Aforamientos, pero en una sola noche, se cambió el Artículo 135 de Nuestra Constitución, para hacer que la deuda del estado fuera lo más importante a pagar. Antes incluso que las inversiones al crecimiento. Este pago, por cierto, es una de las causas del vaciado de la hucha de la Seguridad Social, el cual, el actual gobierno, por no saber gestionar el dinero de nuestros impuestos, nos ha obligado a anteceder a cambio de la calidad de nuestra salud, educación, empleo y crecimiento como país.

Otra de las causas de que la hucha se esté vaciando, es la precariedad del propio empleo (facilitado por la estupenda “Reforma Laboral”, que se nos vendió como “fabrica de empleo” y luego, la ministra Báñez, explicó que “no se había hecho para crear trabajo”)  y, por supuesto, de los paupérrimos salarios. Hasta Hacienda se ha quedado asombrada de lo poco que se ha recaudado este año, en comparación a lo que se esperaba. A parte de la “ayuda” que da el gobierno del PP a la lucha contra el fraude fiscal (menguando los inspectores e inspecciones a las grandes multinacionales y acosando al pequeño inversor, negociante o trabajador de turno).

Hablamos de un gobierno que se sacó de la manga una ley para “aflorar activos ocultos” ante el fisco. El mismo gobierno que pertenece al partido político se le ha acusado de financiación ilegal y uso de dinero negro en varias acciones, como la reforma de su sede principal, en Madrid. El mismo partido que ha financiado sus campañas electorales con dinero “B”, es el que nos pone, en época de declarar, un anuncio cuyo eslogan nos hace sentir como estúpidos: “Si defraudas a Hacienda, no estás defraudando a todos”. Y no, no piensan que el pueblo español se está sintiendo como esos espectadores a los que los payasos le sacan a interactuar en el sketch de turno.

Estamos siendo víctimas de la burla, la mofa y el ninguneo de los actuales políticos. Llámense PP o PSOE, llevamos más de 35 años aguantando sus “y tú más” o “yo lo sé hacer mejor que tú”. Pero, cuando están en el poder, son exactamente lo mismo. Una mera marioneta del poder financiero. Esos a los que nadie vota. Esos que quieren volver a la esclavitud. Esos que dictan las leyes a su antojo. Pero eso se acabó. En este país hay gente honrada que está harta y, aunque durante muchos años se le ha ninguneado, hoy está en las instituciones para “DEVOLVERLAS A LAS MANOS DE LA CIUDADANÍA”, de donde jamás debieron salir.  Hoy, gente que no es profesional de la política, que no se debe ante grandes inversores, bancos o grupos mediáticos… Personas que, como Teresa Rodríguez en el Parlamento de Andalucía, Noemí Santana en el Parlamento de Canarias, Manuela Carmena en el Ayuntamiento de Madrid, Ada Colau en el de Barcelona, o Ramón Espinar en el Senado, están devolviendo el poder a los ciudadanos. Ahora falta llegar al Congreso de los Diputados y a la Moncloa. Así tendremos, de verdad, representantes en las instituciones estatales y autonómicas. Porque todos somos Podemos.

Recomiendo la lectura del estupendo artículo de @protestona1: “Yo Voto a Podemos”. Yo también digo que ya basta de aguantar tanta burla de esos malos gestores, muchas veces ladrones y estafadores, que se hacen llamar “políticos de prestigio”. Yo sé quiénes me representan y sois vosotros, el pueblo. La ciudadanía que, gracias al 15M y a @ahorapodemos, ha ido despertando de la narcolepsia política que había en este país.

Yo Voto por el Cambio Real, el Cambio de la Gente, el Cambio del Pueblo.

Yo Voto a Podemos.

(Dedicado a Lía. ¡Te Quiero!)